jueves, 10 de octubre de 2013

Mi otro yo: Pol.


Hola, me llamo Pol (no confundir con Paul Mccartney; demasiada poco para mí). La vida me ha dado esquinazo durante mucho tiempo, creo que por ello hoy soy lo que soy, un ciudadano de medio pelo. "Antes de conocerte tenía miedo a la luz, ahora que te conozco, temo encontrarme contigo en un lugar iluminado" -me decían. La gente es cruel y no sabéis cuánto. Pero ahora se empieza a cocer nuestra venganza, recién sacada del congelador. 


Supongo que todos pensáis que debo ser el guapo dentro de este grupo terrorista, pero no os equivoquéis, no tengo sex appeal. Tanto es así que me alisté en él como último tren para recuperar mi autoconcepto y así poder conquistar a nuestra líder Ushuaïa. Siempre me han gustando las mujeres morenas, con cintura de avispa, mucho glamour en su posición corporal y amantes de los animales. Sólo he hecho una excepción en mi vida, fue con Paqui y era rubia, pero en realidad me gustaba su hija que tenía menos edad. 



Pero quiero que me toméis en serio, soy una pieza clave dentro de este grupo con unas intenciones muy claras. Sociable, extrovertido y amigable es una mezcla explosiva que cumplo. Soy capaz de conquistar a cualquiera con mi labia y esa es mi gran misión: desenvolverme por los sitios discotequeros de moda en busca de jefes de Gobierno que caigan en la trampa de hacer pactos suicidas.  



Probablemente mi función sea intensa y corta, ya que no duraré mucho en esta misión: los guapos no somos de guerras. Pero creo firmemente en el proyecto, ya que poseemos a la persona más inteligente que jamás me he cruzado, Frank-kensteing. Nada puede fallar...


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